DS PH200M
Automático, Nácar, Acero inoxidable 316L, 39mm
Número de referencia: C036.207.18.126.00

EUR 1 045.-
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Con un diámetro de 39 mm, el famoso DS PH200M causa sensación en cualquier muñeca. El elegante nácar, la cerámica y los diamantes se complementan a la perfección con la ausencia de color favorita de los expertos en moda de todo el mundo, así como con una correa fabricada con el material #tide ocean® sostenible. El calibre automático ultramoderno y una hermeticidad de hasta 200 metros garantizan que este reloj pueda presumir de precisión y potencia.

Versiones

ESPECIFICACIONES TÉCNICAS

Referencia
C036.207.18.126.00
Garantía
2 años de garantía
Peso neto
74.00g
Color
Nácar
Material
Diamante(s)
Nácar
Tipo
Automático
Modelo
POWERMATIC 80.611
Características
Automático
Reserva de marcha de 80 horas
Nivachron
ETA
Swiss Made
Material
Recambio rápido
Sintética
Material del cierre
Acero inoxidable 316L
Referencia
C036.207.18.126.00
Garantía
2 años de garantía
Peso neto
74.00g
Material de la caja
Acero inoxidable 316L
Material del bisel
Acero inoxidable 316L
Cerámica
Superluminova
Cristal
Tratamiento antirreflectante en una sola cara
Cristal de zafiro
Hermeticidad
Hasta una presión de 20 bar (200 m)
Diámetro de la caja
39.00mm
Altura
11.90mm
Entre asas
18.00mm
Color
Nácar
Material
Diamante(s)
Nácar
Tipo
Automático
Modelo
POWERMATIC 80.611
Características
Automático
Reserva de marcha de 80 horas
Nivachron
ETA
Swiss Made
Material
Recambio rápido
Sintética
Material del cierre
Acero inoxidable 316L
Well rounded watch - PH200M 39mm

Un reloj redondo

El bisel giratorio ligeramente abombado está fabricado con cerámica brillante e irrayable. Así, esta parte del reloj, no menos importante por ser visible, aporta una sensación agradable y un diseño elegante.

Mother Of Pearl - PH200M 39mm

Esfera de nácar

El nácar es la capa interna de la concha de determinados moluscos, como algunos mejillones. Como el material es muy quebradizo, tiene que manipularse con sumo cuidado. La naturaleza del material desarrollada naturalmente y su tono y brillo tan particulares hacen que cada esfera de nácar sea realmente única. Ninguna es exactamente igual a otra.